![emotiondiagnosis-articles_images [Recuperado]](https://www.mightier.com/wp-content/uploads/2025/03/Anger-Gets-so-Big-1024x617.jpg)
Todos nos enfadamos, ¡y por unas 1.000 buenas razones! La ira es una emoción común y protectora, a menudo impulsada por sentimientos más profundos y vulnerables como la preocupación, la vergüenza, la culpa y la decepción. La ira puede ser una reacción a la injusticia y la respuesta de nuestro cuerpo a sentimientos de amenaza.
La ira es poderosa e importante, pero también es un sentimiento que puede ser difícil de entender y manejar, especialmente para los niños. La ira intensa puede desencadenar la respuesta automática de lucha o huida de nuestro cuerpo. En estos casos, la ira puede parecer muy grande e incluso fuera de control.
A veces la ira es fácil de detectar: gritar, lanzar objetos, romper cosas o atacar físicamente. Otras veces es más sutil: silencio, mandíbula apretada, irritabilidad o discusiones.
Cómo ayudar a tu hijo a controlar la ira en el momento:
- Modele la calma. Es totalmente normal que también te sientas frustrado, impaciente o enfadado cuando tu hijo está enfadado, pero todos sabemos que el acaloramiento de ambas partes nunca ayuda a que las cosas se calmen. Tómate unos segundos para tranquilizarte (respira hondo, haz una ligera pausa) y poder abordar la situación con calma y la cabeza despejada.
- Valide las emociones de su hijo. Independientemente de su reacción, hay una razón válida para que tu hijo se sienta enfadado. A veces el enfado se mezcla con ansiedad, agobio o estrés. Puede que se haya empeñado en algo que no ha funcionado o que haya percibido algo como injusto. Cuando se sienten esas emociones rápidas e intensas, puede resultar difícil para su hijo comprender realmente cómo se siente y por qué. Tu capacidad para validar sus sentimientos no sólo les ayuda a sentirse vistos y escuchados, sino que también les ayuda a procesar por qué se sienten así en primer lugar.
- Cálmate con ellos. Si tu hijo lleva tiempo jugando a Mightier o tiene una estrategia favorita para calmarse, utilízala con él. Como la ira suele ser una experiencia muy física, la respiración profunda, la relajación muscular progresiva e incluso dar un paseo pueden ser claves para dar a su cerebro y a su cuerpo el tiempo necesario para calmarse y relajarse. También es probable que necesiten que se les recuerde cómo manejarse en esos momentos.
Estas estrategias son estupendas para responder a los grandes momentos cuando suceden, pero las estrategias de prevención, como jugar a Mightier, son mejores para desarrollar habilidades de control de la ira. Obtén más información sobre cómo la herramienta digital de salud mental basada en juegos deMightier puede ayudar a tu hijo y a tu familia.