El Círculo de Control es una herramienta que nos ayuda a distinguir lo que podemos y lo que no podemos controlar en nuestras vidas. Para los niños que luchan contra la ansiedad, la ira o los grandes sentimientos en general, diferenciar entre estas cosas puede ser difícil y abrumador. El Círculo de Control es un elemento visual que ayuda a los niños a reflexionar y centrarse en las cosas que están bajo su control. Esto puede facilitar la conversación y la resolución de problemas.
Utilizando la siguiente hoja de ejercicios o un folio en blanco, pídale a su hijo que dibuje un círculo. Es el círculo de control del niño. En el interior, pídale que escriba o dibuje cosas sobre las que cree que tiene control o influencia. Si su hijo tiene problemas para pensar en cosas, puede darle sugerencias. Algunos ejemplos pueden ser cosas como pensar antes de hablar, ser amable con los demás, esforzarme al máximo o mis sentimientos.
Una vez que tengan una lista de cosas sobre las que sienten que tienen control, pídeles que escriban o dibujen cosas sobre las que no tienen control. No dudes en sugerir ejemplos como lo que dicen o hacen otras personas, el tiempo, mi profesor o tus compañeros de clase.
Puede utilizar esta herramienta para que su hijo reflexione sobre sus sentimientos en torno a aquello sobre lo que tiene control, completar su propio círculo de control con su hijo o utilizar el círculo de control como elemento visual al que volver a menudo cuando resuelva problemas con su hijo.